Tras una muy larga espera, el Verde y el Rojo se encontraron nuevamente. Dos colores que en Guanajuato son sin duda contrarios. León e Irapuato revivieron en versión amistosa el Clásico del Bajío, aunque el dominio fue completamente leonés, con una victoria por 3-0.
Y aunque esta Copa Guanajuato es completamente amistosa, con la invitación a Salamanca, Irapuato y Celaya para jugar en el Nou Camp, las aficiones acudieron al estadio donde hubo una buena entrada.
El equipo de León dio inicio con Óscar García, Diego Lomelí, Francisco Ortiz, Pedro Hernández, Kevin Mora, Alexis Valadez, Daniel Hernández, Tadeo Estrada, Yael Uribe, Jonathan Reyes y Ettson Ayón.
El marcador se abrió a los 40 minutos, luego de que la presión verdiblanca y la férrea marcación fresera desembocó en que por vía del penal, Ayón venciera al guardameta Gerardo Magaña.
Luego de la primera diana, la potencia esmeralda en este novel plantel hizo que la visita sufriera los múltiples ataques, por lo que la cabaña fresera se salvó de manera increíble con tres disparos al poste. Pero una verdadera noche de ensueño es la que vivió Ayón al encontrar su segundo gol a los 76.
Finalmente, el jovencito Jonathan Reyes puso el 3-0 al ‘81 para cerrar una noche nostálgica que se extenderá al sábado, cuando León jugará la final de esta Copa ante el Celaya, que venció al Salamanca en la otra semifinal.
